miércoles, abril 18, 2007

Características físicas y climáticas.

El factor que de modo más determinante actúa sobre el clima de esta parte de la isla es el relieve. La orientación de la cordillera dorsal, relativamente perpendicular a la dirección de los vientos alisios, divide la isla en dos grandes vertientes: barlovento (norte) y sotavento (sur). La considerable altitud de esta cadena montañosa central la convierte en una especie de barrera contra la que chocan los alisios. Esto da lugar a que la humedad con la que estos vientos llegan a las Islas quede retenida principalmente en la vertiente de barlovento (norte), lo que explica las diferencias en el paisaje de ambas vertientes. La realidad climática de esta zona va a estar directamente relacionada con su situación en la vertiente sur de la isla. Esta situación explica la escasez de precipitaciones que se da no solo en El Escobonal, sino en casi todas la zona sur de la isla. La media anual de precipitaciones en El Escobonal es de 333,4 mm., por debajo de los 550-650 mm. que suelen recogerse de media en las áreas de medianías del norte.La zona Sur recibe la mayoría de las precipitaciones por las borrascas que penetran por el Sur-Oeste. Esta situación es poco frecuente lo que hace que en estos lugares domine una relativa aridez. Sin embargo, hay que hacer algunas matizasiones ya que el elevado desarrollo de la altitud hace que pasemos de zonas mucho más áridas en la costa a zonas un poco más húmedas a medida que ascendemos en altitud. Otro factor climático de gran importancia son las temperatura que, a diferencia de las precipitaciones, van dismuyendo a medida que aumenta la altitud. Pasamos, de esta manera, de unos 19,5º C. de media anual en la costa, a unos 18º C. aproximadamente en las medianías para continuar descendiendo hasta llegar a los 9,8ºC de media que se alcanzan en las cumbres de Izaña ,aunque las mínimas en estas altas cotas pueden llegar a bajar incluso de los 0º C. Otro rasgo característico del clima de este municipio es la elevada insolación (horas de sol), predominando, por lo tanto, los días soleados con respecto a los nublados.
En la Comarca de Agache se ha producido tradicionalmente un aprovechamiento de la tierra a través de bancales. Las piedras que forman sus muros se denominan pumitas (productos de coladas volcánicas ácidas), su tonalidad es clara y son ligeras de peso. El conjunto que constituyen aporta al paisaje un aspecto peculiar, en perfecta simbiosis con el medio. Este es un tipo de explotación de la tierra a manera de terrazas escalonadas (comparable al de algunos países de Sudamérica, en particular Perú, y a algunos países asiáticos), en el que hay, a su vez, una amplia superficie de terreno en la que básicamente las tierras de cultivo son también pumitas alteradas conocidas popularmente como jable. La abundancia de este material, y la facilidad para su trabajo, permitieron la creación de un paisaje muy peculiar, pues tanto el hábitat como los suelos de cultivo se localizan en los lugares de mayor abundancia de las mismas. El jable permite, dada la cualidad higroscópica del mismo, que un suelo conserve durante mucho tiempo la humedad, con lo cual su consumo de agua se ve reducido considerablemente. Así mismo, posibilita el ahorro de trabajo ya que apenas salen hierbas, y las labores de siembra y rastrillo son relativamente sencillas dado lo suelto de los materiales. Tampoco es de desdeñar la acción temperante que ejerce sobre el subsuelo y que complementa la conservación de la humedad, dado su color blanco y su naturaleza porosa.
Una amplia franja del territorio de la Comarca, comprendida entre los 1.200 y 2.300 m. de altitud, se encuentra incluida en el Parque Natural denominado "Corona Forestal de Tenerife", el cual fue declarado como tal por la Ley 12/87 de declaración de Espacios Naturales Protegidos de Canarias y reclasificado a su actual categoría por la Ley 12/94 . De igual forma, Agache se encuentra flanqueado, y también formando parte de los mismos; al Norte, por el “Parque Natural de Corona Forestal”, y al Sur, por el “Monumento Natural del Barranco de Fasnia y Güímar”. La parcela se encuentra ubicada a una altitud aproximada de 502,81 metros sobre el nivel del mar, y a una distancia en linea recta del mismo de unos 3342 metros aproximadamente. De este modo, podemos apreciar que a una distancia relativamente cercana a la costa, el lugar cuenta con una altitud considerable. La inclinación de la parcela es nula, aunque las paredes del barranco que la contienen la orientan desde el Noroeste hacia el Sureste.