viernes, abril 20, 2007

Localización: Barranco de La Hendia.

El Barranco de La Hendía se encuentra en el término municipal de Güímar, concretamente en el pueblo de El Escobonal. Este pueblo sureño, se encuentra en la comarca agachera. Agache limita al este con el Océano Atlántico, al sur con el municipio de Fasnia, al oeste con La Orotava en las cumbres de Izaña y el Cabezón y al norte con el cauce del Barranco de Badajoz.Constituye así la primer comarca de las Bandas del Sur. Su 60 kilómetros cuadrados de superficie se abren en abanico desde la cumbre hasta la costa y con una pendiente que oscila entre el 20 y el 25 %.
Una visión aérea de la comarca nos muestra el elevado número de barrancos que la surcan en disposición radial, poco jerarquizados y manteniendo un curso casi rectilíneo. Los más destacados son el Barranco de Herques, El Barranco de Pedro Díaz que en su descenso agrupa al Barranco de el Cubacho y el de Amorín, y paralelo al anterior, el Barranco de la Rosa. El barranco de La Hendía junto, con otros pequeños afluentes, son agrupados por el barranco de la Rosa que desemboca en la playa de Chimaje.

El lugar donde se proyecta la intervención en el paisaje, se trata de un pequeño tramo del barranco a la altura y circundado por la carretera general del sur. Este tramo del barranco ha sido utilizado por desaprensivos que vertían en él todo tipo de basuras y escombros. Actualmente, el cauce discurre bajo un túnel, lo cual ha permitido entullar la zona creando una amplia parcela que se encuentra a nivel de la carretera. En esta imagen podemos ver una fotografía aérea de la zona, donde se aprecia la parcela rodeada por la carretera vieja a la altura de la Avenida Axaentemir (señalada en amarillo). El área de trabajo cuenta con 2886 metros cuadrados aproximadamente, que se distribuyen de forma irregular pero coincidiendo con la morfología del cauce del barranco, así podemos trazar un eje mayor de 101metros y un eje menor de 28 metros.

La parcela, en la actualidad, se usa como lugar de aparcamiento para los ciudadanos que visitan el casco central del pueblo, pues en él se encuentran la plaza y La iglesia de San José, la oficina de correos, el consultorio médico, la oficina del Ayuntamiento, el ciber rural, el Tagoror cultural de Agache que sirve de museo y biblioteca, la cripta, el centro cultural, etc. Se trata de una de las zonas más transitadas del lugar que junto con su privilegiada posición, adyacente a la carretera vieja, hacen de la zona un lugar óptimo para crear un lugar de descanso, en un entorno natural y rodeado de la vegetación autóctona.

miércoles, abril 18, 2007

Características físicas y climáticas.

El factor que de modo más determinante actúa sobre el clima de esta parte de la isla es el relieve. La orientación de la cordillera dorsal, relativamente perpendicular a la dirección de los vientos alisios, divide la isla en dos grandes vertientes: barlovento (norte) y sotavento (sur). La considerable altitud de esta cadena montañosa central la convierte en una especie de barrera contra la que chocan los alisios. Esto da lugar a que la humedad con la que estos vientos llegan a las Islas quede retenida principalmente en la vertiente de barlovento (norte), lo que explica las diferencias en el paisaje de ambas vertientes. La realidad climática de esta zona va a estar directamente relacionada con su situación en la vertiente sur de la isla. Esta situación explica la escasez de precipitaciones que se da no solo en El Escobonal, sino en casi todas la zona sur de la isla. La media anual de precipitaciones en El Escobonal es de 333,4 mm., por debajo de los 550-650 mm. que suelen recogerse de media en las áreas de medianías del norte.La zona Sur recibe la mayoría de las precipitaciones por las borrascas que penetran por el Sur-Oeste. Esta situación es poco frecuente lo que hace que en estos lugares domine una relativa aridez. Sin embargo, hay que hacer algunas matizasiones ya que el elevado desarrollo de la altitud hace que pasemos de zonas mucho más áridas en la costa a zonas un poco más húmedas a medida que ascendemos en altitud. Otro factor climático de gran importancia son las temperatura que, a diferencia de las precipitaciones, van dismuyendo a medida que aumenta la altitud. Pasamos, de esta manera, de unos 19,5º C. de media anual en la costa, a unos 18º C. aproximadamente en las medianías para continuar descendiendo hasta llegar a los 9,8ºC de media que se alcanzan en las cumbres de Izaña ,aunque las mínimas en estas altas cotas pueden llegar a bajar incluso de los 0º C. Otro rasgo característico del clima de este municipio es la elevada insolación (horas de sol), predominando, por lo tanto, los días soleados con respecto a los nublados.
En la Comarca de Agache se ha producido tradicionalmente un aprovechamiento de la tierra a través de bancales. Las piedras que forman sus muros se denominan pumitas (productos de coladas volcánicas ácidas), su tonalidad es clara y son ligeras de peso. El conjunto que constituyen aporta al paisaje un aspecto peculiar, en perfecta simbiosis con el medio. Este es un tipo de explotación de la tierra a manera de terrazas escalonadas (comparable al de algunos países de Sudamérica, en particular Perú, y a algunos países asiáticos), en el que hay, a su vez, una amplia superficie de terreno en la que básicamente las tierras de cultivo son también pumitas alteradas conocidas popularmente como jable. La abundancia de este material, y la facilidad para su trabajo, permitieron la creación de un paisaje muy peculiar, pues tanto el hábitat como los suelos de cultivo se localizan en los lugares de mayor abundancia de las mismas. El jable permite, dada la cualidad higroscópica del mismo, que un suelo conserve durante mucho tiempo la humedad, con lo cual su consumo de agua se ve reducido considerablemente. Así mismo, posibilita el ahorro de trabajo ya que apenas salen hierbas, y las labores de siembra y rastrillo son relativamente sencillas dado lo suelto de los materiales. Tampoco es de desdeñar la acción temperante que ejerce sobre el subsuelo y que complementa la conservación de la humedad, dado su color blanco y su naturaleza porosa.
Una amplia franja del territorio de la Comarca, comprendida entre los 1.200 y 2.300 m. de altitud, se encuentra incluida en el Parque Natural denominado "Corona Forestal de Tenerife", el cual fue declarado como tal por la Ley 12/87 de declaración de Espacios Naturales Protegidos de Canarias y reclasificado a su actual categoría por la Ley 12/94 . De igual forma, Agache se encuentra flanqueado, y también formando parte de los mismos; al Norte, por el “Parque Natural de Corona Forestal”, y al Sur, por el “Monumento Natural del Barranco de Fasnia y Güímar”. La parcela se encuentra ubicada a una altitud aproximada de 502,81 metros sobre el nivel del mar, y a una distancia en linea recta del mismo de unos 3342 metros aproximadamente. De este modo, podemos apreciar que a una distancia relativamente cercana a la costa, el lugar cuenta con una altitud considerable. La inclinación de la parcela es nula, aunque las paredes del barranco que la contienen la orientan desde el Noroeste hacia el Sureste.

martes, abril 17, 2007

Vegetación

La Macaronesia es el nombre colectivo con el que se conocen a cinco grupos de islas situadas en la zona centrooriental del Atlántico Norte; estos archipiélagos son los de Azores, Madeira, Salvajes, Canarias y Cabo Verde. El Archipiélago Canario es el de mayor riqueza florística de la Región Macaronésica. Es, además, la cuarta región natural del mundo en cuanto a endemismos florísticos, con 1700 plantas superiores catalogadas, de las que unos 20 géneros y más de 500 especies son endémicas. Hasta el momento se conocen un total de 14.000 especies (sin tener en cuenta protistas y moneras), de ellas casi 9.000 son de fauna, en torno a 4.000 de flora y más de 1.000 hongos.
La abundancia de microclimas y, en consecuencia, de hábitats naturales en Tenerife, se refleja claramente en la vegetación insular, formada por una flora rica y variada entre la que destacan los 140 endemismos tinerfeños. Los cuales hacen que la isla tenga la mayor relación de endemismos florísticos de toda la Macaronesia.
El clima junto con otros factores como la altitud, la insolación y la exposición a los vientos alisios van a condicionar la distibución de la vegetación.
El piso bioclimático correspondiente a esta zona es el termomediterráneo xerofítico semiárido superior y en él nos encontramos con una franja de transición muy rica florísticamente, pero muy degradada por coincidir con la zona de los an­tiguos asentamientos humanos, con sus vías de co­municación y terrenos de cultivo. Sólo en las medianías de la ladera, así como en los barrancos más profundos, se localizan los restos de un sabinar de cornisa (Junipero canariensis-Oleetum cerasiformis), localmen­te enriquecido con elementos del fayal-brezal; tam­bién merecen destacarse los restos de esta formación situados en los barrancos de Pedro Díaz y Herques. Este tipo de vegetación ha dado nombre a algunas entidades de población de la Comarca, como La Sabina Alta y La Sabinita. En esta franja, situada entre los 400 y los 900 m.s.n.m., además de la sabina (Juniperus turbinata ssp. canariensis) son frecuentes otras especies que for­man parte del antiguo "monte bajo" (Mayteno­-Juniperion canariensis), como el acebuche (Olea europaea ssp. cerasiformis), el almácigo (Pistacia atlantica), el peralillo (Maytenus canariensis), la leña negra (Rhamnus crenulata), el jasmín (Jasminum odoratissimum), etc. A estos elementos se unen los más agresivos y característicos tanto del tabaibal­-cardonal del piso inferior, como del monte verde y pinar de los pisos superiores; además, destacan en esta banda los matorrales de sustitución nitrófilos (Artemisio thusculae-Rumicion lunariae), instalados preferentemente sobre huertas abandonadas, que, aunque ya aparecían en la anterior, adquieren aquí un papel relevante, dada la fuerte degradación a que ha estado sometida; están dominados por la magar­za (Argyranthemum frutescens ssp.frutescens), el incensio (Artemisia thuscula) y la vinagrera (Rumex lunaria); a los anteriores se suman los matorrales de suelos decapitados (Cisto monspeliensis-Micromerion hyssopifoliae), caracterizados sobre todo por el juagarzo (Cistus monspeliensis), el to­millo burro (Micromeria hyssopifolia) y la mosquera (Globularia salicina).
El bosque termófilo particular, se sitúan entre los 400 y los 900 m.s.n.m., ocupando una posición intermedia entre los cardonales y el monte verde o pinar, tratándose de un bosque xérico. Bosquetes y matorrales termófilos, que prosperan sobre suelos bien estructurados pero poco profundos. Están caracterizados por algunas especies arbóreas, que en función de su dominancia van a caracterizar los “sabinares”, “acebuchales”, “almacigales”, etc. Hay que destacar la existencia de varios ejemplares de drago (Dracaena draco) en el Barranco de Badajoz, en una zona muy escarpada e inaccesible. En la comarca de Agache, los bosques termófilos han sido totalmente eliminados, como en el resto de la isla. Únicamente se puede comentar la existencia de algunos elementos aislados en las laderas de los barrancos más importantes.

lunes, abril 16, 2007

Lista de espesies.

Del Bosque termófilo: Sabinas, Acebuches, Almácigos, Peralillos, Leña negra, Jazmín, Dragos, Palmeras.
Del tabaibal cardonal: Tabaibas, Cardones, Balos, Cornicales, Tasaigos.
Del pinar: Pinos, Escobones...
Del Matorral de sustitución: Magarzas, Inciensos, Vinagreras.. .
De Vegetación de suelos decapitados: Jaras, tomillo burro, mosquera...
La disposición de las plantas en el espacio, estará en función de su área de crecimiento óptimo.De este modo, entre algunas podremos dejar poca separación pero entre otras debemos respetar una distancia prudencial para que el elemento se pueda desarrollar sin ningún inconveniente.